El juego espiritual del dinero

Si padeces pensamientos atemorizantes, obsesivos o inquietantes, sabes de sobra cómo pueden llegar a condicionar tu vida. Puedes incluso llegar a creer que estos pensamientos te definen. ¿Eres acaso una mala persona? ¡No! No eres malo –ni estás loco—. Estos molestos pensamientos que entran en tu mente de manera espontánea se denominan pensamientos invasivos no deseados, y muchas personas buenas y racionales los tienen. Afortunadamente, hay técnicas de probada efectividad que puedes utilizar para superarlos y recuperar tu vida. Esta extraordinaria guía te ofrece una terapia, de tipo...

Este libro inteligente tiene un objetivo claro, que es enseñar la mentalidad y los hábitos correctos que sus clientes deben adoptar en pasos muy simples para construir y mantener una familia iluminada y tener hijos felices sin pérdida de tiempo ni dolores de cabeza.

Existimos en un mundo vertiginoso que poco tiene que ver con el lugar ideal que imaginamos para vivir. El contexto se asemeja a una gran ola que nos arrastra, exigiéndonos una adaptación rápida a cambios violentos, sin darnos demasiado margen para reflexionar o detenernos a pensar. Sin tiempo ni espacio para preguntarnos sobre el modo en que vivimos y lo que realmente necesitamos para ser felices, los primeros síntomas de la vorágine irrumpen en nuestra cotidianeidad. Ansiedad, depresión, angustia, estrés, enfermedades autoinmunes, alergias y muchos otros síntomas afectan tanto al...

Es este un relato testimonial de fe cristiana. Trata un caso de Síndrome de Cansancio Crónico, problema de salud causado por el estrés de la vida agitada de nuestro tiempo. El texto narra las experiencias vividas por la autora en un proceso de prueba y formación espiritual. Dos ejes articulan el relato: la realidad física limitada y la relación con lo divino, el primero conforma un torbellino en medio de un mar tranquilo, donde escuchar: “Estad en quietud y sabed que yo soy Dios” sugieren las impostergables “Vacaciones de Dios” que, como cita Yolanda Arceo en el prefacio, eran...