El Camino de Siete Años

La diversidad natural de Indonesia impresiona, fascina e inspira, desde cumbres nevadas, bosques de sándalo y densa jungla hasta los increíblemente verdes arrozales. Es un paraíso para los submarinistas y, ya se trate de una maravillosa playa remota, el encuentro con un orangután o una prolongada noche de fiesta en Bali, Indonesia siempre gana. .Surf de día, fiesta de noche y una cultura fascinante por descubrir en Bali. .Mapas. .Ascender a la antigua stupa budista de Borobudur y recorrer los mercados de batik de la animada Yogyakarta. .Transporte. .Ver los dragones de Komodo cerca de la ...

Como los cisnes que retozan en el lago Lemán, el mayor de Europa, Ginebra es un rara avis, cosmopolita y considerada la capital de Suiza (sin serlo). Los habitantes de la segunda ciudad del país conversan en todas las lenguas por sus calles pavimentadas de oro. • Bañarse en el lago o disfrutar de una fondue en los muy ginebrinos Bains des Pâquis. • Mapas. • Seguir un curso intensivo sobre asuntos internacionales en el Palacio de las Naciones. • Transporte. • Ampliar horizontes en el Museo Etnográfico. • Restaurantes y alojamiento. Incluye: Historia, Puntos de interés,...

Monumentos icónicos, abadías en islas, comida fabulosa, vinos excelentes... Abundan las razones para emprender un voyage por Francia. Tanto si se planea visitar las corniches de la Riviera francesa como perderse entre los Alpes nevados o probar los vinos sagrados de Champaña, este país está hecho para recorrerlo a través de rutas inolvidables que se adentran en su alma. Con paisajes impresionantes, autopistas estupendas y una de las redes de carreteras secundarias más completas del mundo solo queda abrocharse el cinturón y ¡ bon voyage!

Viajes de Francisco de Miranda por Europa, Rusia y Estados Unidos. Fragmento de la obra Viajes por Rusia 12 mayo 1787 Moscú. Tuve visita por la mañana del ayudante mister Besin, teniente coronel en este servicio que me significó que el marechál le prevenía que franquease cuanto yo hubiese de menester. Me hizo traer una berlina a cuatro cabos que cuesta diariamente 4 rublos. Salí a la una a hacer visitas, mas el gobernador no estaba en casa... le dejé mis cartas y un billete, pues ni yo entiendo a mis criados, ni ellos me en tienden a mí... después de otras vine a casa, me hallé...