Hernán Cortés fue un destacado conquistador y explorador español del siglo XVI, conocido principalmente por liderar la expedición que resultó en la caída del Imperio Mexica y la posterior colonización de México. Nació en Medellín, en el actual Extremadura, España, alrededor de 1485, en el seno de una familia noble pero de escasos recursos. Desde joven, Cortés mostró un gran interés por la aventura y los relatos de tierras lejanas, lo que lo llevó a embarcarse hacia el Nuevo Mundo.
En 1504, partió hacia la isla de Haití y, posteriormente, se trasladó a Cuba, donde se involucró en diversas expediciones y comenzó a acumular influencia y riqueza. Su ambición lo llevó a obtener el permiso del gobernador de Cuba, Diego Velázquez, para liderar una expedición a México en 1519, con el objetivo de explorar y conquistar nuevas tierras. Sin embargo, su relación con Velázquez se deterioró, lo que hizo que Cortés se apresurara a partir antes de recibir cualquier orden de suspensión.
Al llegar a las costas de México, Cortés se encontró con diversas culturas indígenas, incluyendo a los totonacas y los tlaxcaltecas, quienes se aliaron con él en su lucha contra el poder dominante de los mexicas, liderados por el emperador Moctezuma II. Cortés logró avanzar hacia la gran ciudad de Tenochtitlán, donde fue recibido inicialmente con hospitalidad. Sin embargo, la relación entre los españoles y los mexicas se tornó rápidamente conflictiva.
El 13 de agosto de 1521, tras meses de intensos combates y una estrategia ingeniosa que incluía el uso de alianzas indígenas y la superioridad tecnológica de las armas españolas, Cortés consiguió la rendición de Tenochtitlán. Esta victoria no solo marcó el fin del Imperio Mexica, sino que también sentó las bases para la expansión del dominio español en el continente americano.
Tras la conquista, Cortés fue nombrado gobernador de Nueva España y se dedicó a la administración de los territorios conquistados. Implementó un sistema de encomiendas que permitió a los colonizadores españoles explotar la mano de obra indígena en la agricultura y la minería. Sin embargo, su estilo de liderazgo autocrático y sus prácticas abusivas provocaron descontento tanto entre los indígenas como entre otros colonizadores, lo que finalmente contribuiría a su caída en desgracia.
A pesar de sus logros, la carrera de Cortés estuvo marcada por la controversia. En 1530, se le retiró el cargo de gobernador en parte debido a sus conflictos con la autoridad colonial y su desprecio por las reglas impuestas por la Corona española. Regresó a España en 1540 tras varios fracasos económicos y la pérdida de influencia. Pasó sus últimos años luchando por recuperar su prestigio y fortuna.
Hernán Cortés falleció el 2 de diciembre de 1547, en Castilleja de la Cuesta, cerca de Sevilla. Su vida y obra son objeto de controversia y análisis; mientras algunos lo ven como un héroe y pionero, otros lo consideran un conquistador brutal cuyo legado estuvo marcado por la violencia y el sufrimiento infligido a las poblaciones indígenas. A pesar de ello, su figura sigue siendo fundamental para comprender el proceso de colonización de América y sus implicaciones históricas.
Hoy en día, el legado de Cortés es estudiado en múltiples disciplinas, incluyendo la historia, la literatura y la antropología, y su vida continúa inspirando debates sobre la conquista, la cultura y la identidad en México y América Latina en general.