Para comprender el catecumenado

1. La visi?n de la econom?a divina: la vid verdadera como el organismo del Dios Triuno. 2. La visi?n del Esp?ritu consumado: la consumaci?n del Dios Triuno procesado y consumado. 3. La visi?n del ?rbol de la vida y del camino de la vida. 4. La visi?n del vivir del Dios-hombre tipificada por la ofrenda de harina. 5. La visi?n de la persona y obra de Cristo en Su muerte y resurrecci?n. 6. La visi?n de la persona y obra de Cristo en Su ascensi?n. 7. La visi?n de la iglesia tipificada por el candelero de oro. 8. La visi?n del reino de Dios como la esfera de la vida divina. 9. La visi?n de la...

Si el recurso a los Padres es un paso insoslayable en la renovación emprendida por el Vaticano II, este remonte a las fuentes patrísticas se hace más apremiante, cuando se trata de la crisis del concepto de Dios que padece nuestra sociedad actual.

Agustín escribe: «¡Oh sacramento del amor de Dios!... El que quiere vivir tiene dónde vivir, tiene de quién vivir. Que se acerque, crea, se una al cuerpo de Cristo para ser vivificado». La libertad infinita de Dios se inclina sobre la libertad finita del hombre, como unamadre se inclina sobre su hijo. La inextinguible riqueza del misterio eucarístico es como la luz del sol sobre los mosaicos de San Marcos. Ilumina la belleza de las innumerables teselas de la vicisitud humana, desvelando el designio completo que da sentido incluso a las más oscuras y gastadas por el paso del tiempo.

El autor propone un itinerario espiritual que sigue de cerca el desarrollo de los ritos litúrgicos, y ofrece así a sacerdotes y seglares materia de meditación sobre la Santa Misa. Expresa también su deseo "de ayudar a hacer realidad -en mí mismo y en otras muchas personas- la gran aspiración de San Josemaría Escrivá de Balaguer: "Ante todo, hemos de amar la Santa Misa que debe ser el centro de nuestro día. Si vivimos bien la Misa, ¿cómo no continuar luego el resto de la jornada con el pensamiento en el Señor, con la comezón de no apartarnos de su presencia, para trabajar como Él ...