Angélica de Perrebía. Historia breve

Patrice Martinez fue una talentosa actriz y escritora que dejó una huella imborrable en el mundo del entretenimiento. Nacida el 12 de octubre de 1963 en los Estados Unidos, su carrera se destacó en la pantalla gracias a su habilidad actoral y su carisma natural.

Desde temprana edad, Patrice mostró un interés innato por la actuación. Se trasladó a Los Ángeles para perseguir su sueño en el cine y la televisión, donde rápidamente se destacó por su versatilidad y talento. A lo largo de su carrera, participó en diversas producciones, pero su papel más conocido fue el de Monica en la exitosa serie de televisión “Zorro”, emitida entre 1990 y 1993. Esta serie, que revivió el clásico personaje de la cultura popular, le permitió a Martinez ganarse un lugar especial en el corazón de los fanáticos.

En la serie, Patrice no solo mostró su capacidad actoral, sino que también demostró su talento en la danza y la música. Su personaje estaba diseñado no solo para ser una figura romántica, sino también una mujer fuerte e independiente, un aspecto que resonó con la audiencia. A través de su interpretación, Patrice logró inspirar a muchas jóvenes, convirtiéndose en un modelo a seguir.

Además de su trabajo en televisión, Patrice también participó en producciones teatrales y fue reconocida por su contribución al arte escénico. A lo largo de su carrera, trabajó junto a talentosos actores y directores, lo que le permitió crecer y mejorar continuamente en su oficio. A pesar de los desafíos que enfrentó en la industria, Patrice persistió y utilizó su voz y habilidades para abrir puertas a más mujeres en el cine.

La vida de Patrice Martinez no solo se limitó a su carrera en la actuación. También fue una apasionada defensora de los derechos de las mujeres y utilizó su plataforma para abogar por la igualdad y la representación en la industria del entretenimiento. A lo largo de los años, se involucró en diversas iniciativas y organizaciones que buscaban empoderar a las mujeres y fomentar la diversidad en todos los ámbitos.

Lamentablemente, la vida de Patrice se vio truncada cuando falleció el 24 de marzo de 2020, a la edad de 56 años. Su muerte fue una gran pérdida para la comunidad artística, quien la recuerda no solo por su talento, sino también por su espíritu inquebrantable y su compromiso con causas sociales. Aunque su tiempo en este mundo fue corto, el legado que dejó Patrice Martinez perdurará en la memoria de quienes la vieron actuar y lucharon junto a ella.

En resumen, Patrice Martinez fue una actriz multifacética que impactó la industria del entretenimiento a través de su trabajo en televisión y teatro. Su legado como pionera y defensora de los derechos de las mujeres, así como su talento artístico, la convierten en una figura memorable en la historia del cine y la televisión.

En Soledades, galerías y otros poemas encontramos al Machado «misterioso y silencioso». Un Machado que elabora un modernismo íntimo que permitirá que sus poemas resistan bien la prueba del tiempo y los embates de las modas literarias. El libro de Machado es un libro teñido de melancolía; con ello estamos descubriendo esa veta de romanticismo que nunca habrá de abandonar.»

El fallecimiento del patriarca de la familia, Jorge Saavedra, desata un inesperado comportamiento en su viuda, Alejandra Saavedra, que sorprenderá a toda la familia. Solamente su única nieta, llamada también Alejandra, se podrá acercar a ella y escuchar la historia familiar que hasta ese momento se le ha negado. Esta historia, que no dejará a nadie indiferente, se desplegará a lo largo de las páginas que la joven Alejandra verterá en un futuro libro. Una novela llena de sorpresas, de relaciones familiares, de amistades que perdurarán a lo largo de los años, de traiciones, de amores...

El Pampa es un joven ingeniero que se retira al desierto de Atacama con la finalidad de romper con el riguroso marco de la vida cotidiana. En su último viaje a ese lugar, desaparece sin dejar huellas en el transcurso de una romería religiosa. El no hacer es un acto paradójico que se desacopla de la perspectiva temporal, que interrumpe el flujo de la historia, además de plantear un reto al condicionamiento mental y social vigente. La vida onírica está llena a tope de no «haceres», de ese modo, contradice la sobrevaloración que existe de la vigilia.

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