Solo una sombra
En la España contemporánea, la finca La Mala Jara es un resquicio de la comarca de Mérida, donde los gestos y los usos siguen anclados a un pasado de costumbres miserables de cacique y pueblo provinciano. Fruto de un enlace ilegítimo entre el dueño de la finca, don Juan Enríquez Montalvo y el ama de llaves de la casa, nace Prisco, un muchacho medio lelo, lobuno, asilvestrado y huidizo que se convertirá en pastor. Será a través de sus ojos que se narrarán los acontecimientos principales. Acostumbrado a vivir entre animales, se mueve en la noche como una alimaña y espía las...