Thomas Bernhard
Artista de la exageración, maestro de la nada, monómano incorregible, moralista, aguafiestas, vulnerable, depresivo, sensible, alegre, satírico, contradictorio..., la lista de epítetos que, en algún momento, se ha aplicado a Thomas Bernhard llenaría varias páginas. Y todos ellos le convenían. Sin embargo, la figura de Thomas Bernhard sigue agigantándose después de su muerte y es ya indiscutible que se trata de uno de los grandes escritores del siglo XX. Pero, curiosamente, su vida presenta todavía abundantes zonas de sombra, sobre todo desde que la crítica reparó en que sus así...